viernes, 29 de enero de 2010

El silencio del corazón...


Clamar significa dar voces, gritar, hablar en tono alto de voz


En Jeremías 33:3 Dios dice claramente que clamemos a El y El nos responderá...


No dudo que así es por que he vivido sus respuestas después de haber elevado mi clamor hacia El.

Solo que hay veces que nuestro corazón se siente cansado, agotado, sin fuerza siquiera para proferir una palabra...

¿Les ha pasado? ese como caminar en algún lugar pedregoso, sentarse en ese camino árido ya sin fuerza para continuar caminando, pensando,después de todo, que ahí nos quedaremos pues ya no tenemos energía suficiente para seguir adelante...

¿Como clamar? si nuestra voz se ahoga y ya no hay como hecharle pa´lante...


He descubierto, que después de todo, Dios es tan sabio, tan amoroso que también mira nuestro corazón...y escucha su silencio...y muy quietamente, casi como un susurro te dice:

"Estoy aquí...yo te ayudo, te sostendré, no de la mano solamente, te sostendré como a ese pequeño que esta aprendiendo a caminar, rodeándote por la cintura y podrás sentir mi brazo poderoso que a cada paso, irá contigo...lo haré, no por que hayas caminado poco o demasiado, ni por que seas muy entregado, lo haré por que te amo, por que eres mi hijo y te he prometido que siempre estaré contigo..." (Isaias 41:10)


Ah, cibernautas lectores , estas palabras, también me dejan sin aliento, pero ya no con un corazón dolido, sino con un corazón reconfortado.


Bendiciones!!

No hay comentarios: